miércoles, 29 de enero de 2014

UNKNOWN

Pocas cosas para mí tienen sentido. El domingo por la noche estuve en la exposición temporal de Leonora en Plaza Loreto. Era el penúltimo día. Al otro día temprano, antes de ir al trabajo, fui entusiasmada para admirar y fotografiar estas obras de nuevo. Me colman y se integran a mi mundo interno. A este magnifico personaje escultórico lo miro sin cesar porque me parece tremandamente hermoso. Tengo ganas de hacerme ovillo cerca de sus pies. Quedarme ahí y dormir un rato... Las expresivas manos del personaje están con las palmas hacia el cielo, tal vez  esperando algo, como yo...  

martes, 14 de enero de 2014

LOS PERROS

El Dr. Gary Weitzman, presidente de la Humane Society de San Diego y ex director general de la Liga de Rescate de Animales (Animal Rescue League) de Washington, ha trabajado con decenas de miles de perros callejeros y dice que no hay duda de que los animales y las personas se comunican, pero algunos lo hacen mejor que otros.

"Los perros quieren estar con nosotros y hacer las cosas bien. El perro nunca hace nada por despecho o venganza. Esa es una cualidad humana. Los perros solo quieren complacernos", dice Weitzman. "No hay que malinterpretar lo que los perros nos dicen".

Jerry Ericksen, de Los Angeles, tiene dos perros con diferentes necesidades y que requieren lenguajes distintos. Forest es un pit bull que fue maltratado y mal alimentado antes de que Ericksen se lo llevase. Es muy tímido y cuando Ericksen lo lleva a un parque de perros se queda pegado a él, agachado. "Le hablo en un tono suave. Es muy cooperativo y se siente satisfecho", dice Ericksen. Buster, en cambio, es un bóxer ciego de 40 kilos (90 libras). "Cuando lo llamo, tengo que gritarle y aplaudir para que sepa dónde estoy", relata Ericksen. "Si camina hacia donde no corresponde, le grito 'stop' (párate) y él cambia de dirección". Buster y Forest llevan conviviendo seis meses, pero también se comunican. "Cuando volvemos a casa luego de ir al parque, Forest entra primero, camina tres metros (unos 10 pies) y espera. Cuando le saco la correa a Buster, Forest se hace cargo y lo guía hacia el patio", cuenta Ericksen.

La National Geographic Society acaba de publicar el libro de Weitzman "Cómo hablar el lenguaje de los perros" (How to Speak Dog). El autor, un veterinario, espera que ayude a la gente a comprender mejor lo que el perro trata de decirle.

"Los perros leen los labios y el lenguaje corporal. Pueden distinguir tus expresiones faciales. Algunos responden a lo que ven, otros a lo que decimos. Su capacidad natural de interpretar las expresiones faciales es muy superior a la nuestra", afirmó Weitzman.

Hay que asegurarse de que el perro puede escuchar cuando uno le habla, indicó Weitzman. Algunos nacen sordos o pierden el oído con el correr de los años. Cuando el perro tiene orejas largas, se dificulta más la audición.

De vez en cuando pareciera que un perro lo comprende a uno. Es como que le lee la mente al dueño. "Realmente pienso que estos animales son almas gemelas. Tuve una perra que sé que fue mi alma gemela. Nos entendíamos con una mirada", comentó.

Fuente: http://www.oem.com.mx