miércoles, 14 de noviembre de 2012

R. S.

Pasamos demasiado tiempo tratando de ser,
tratando de conseguir,
tratando de llegar a algún lugar.

Llenamos con nuestra vanidad,
con nuestros deseos de grandeza
la maleta de los enseres inútiles.

Sumergido en un jacuzzi de Tlayacapan
pienso en todas aquellas cimas que jamás quise alcanzar,
en todas aquellas personas que jamás quise ser.

Podría, en este instante,
ser una mota de polvo,
menos que nada,
tirarlo todo por la borda,
y no me rasgaría las vestiduras.

Entre bocanada y bocanada de realidad
la sombra de Yolanda, que no es sino mi sombra,
bebe café conmigo y me explica
que las personas no somos más que un destello de luz,
que en el mundo sobra mucho miedo y falta mucho amor,
que las patrias son un engaño
y que es inútil buscar y buscar en lugares lejanos
lo que sólo podemos encontrar juntos.

Escrito y dedicado para mi por Rüdiger Safranski (seudónimo)  13 de noviembre de 2012